Ejercicios de improvisación

   ¡Hola, letritas hermosas!

   ¿Recuerdan la frase popular “la práctica hace al maestro”? Pues en mi experiencia tiene mucha verdad. Resulta que cuando practico con mis compañeros la narración oral hacemos ejercicios de improvisación y analizándolo un poco, eso se puede recrear en la escritura. Por lo tanto, les he traído cuatro mini retos o juegos para ejercitar la improvisación al momento de escribir (además de que viene fabuloso cuando tenemos un bloqueo y necesitamos recuperar la inspiración, en serio, les recomiendo hacer este tipo de cosas).

   1. El primero solía ser un reto para fickers, se lo conoce (o conocía, no sé si se continúa haciendo) como “meme musical”. La verdad es que funciona. Lo que tienen que hacer es simple: 

       a) Busquen un sitio cómodo para poder escribir y escuchar la música que quieran.

       b) Coloquen su reproductor de música (el que quieran, claro) en una lista con modo aleatorio.

      c) Por cada canción van a escribir lo primero que les venga a la cabeza (idea, poema, microcuento, frases, reflexiones...), pero sólo durante la canción en curso. Cada vez que esta cambie, ustedes pasan a otra idea. No se queden pensando en cómo van a escribir lo que se les ocurrió, sólo tecleen y dejen que todo fluya, aunque sean tonterías e incoherencias.

       d) Vayan a su ritmo y gusto, si quieren retarse con diez (este era el número original), veinte o treinta canciones, adelante. Si sólo quieren probar unas tres o cinco, también, adelante. La gracia de esto es que improvisen ideas y se sientan cómodos al mismo tiempo.

      e) ¡Listo! Han completado el mini reto. Ahora tienen nuevas ideas para pulir, moldear, fusionar, guardar o desechar a su antojo. Incluso, pueden usarlo con regularidad para desestresarse o jugar con ideas en concreto; por ejemplo, fijar un tema en específico y que el ejercicio gire sobre ese tema.

   2. Este me encanta porque lo he hecho y cuando empecé le puse el nombre de “cuentiembre” (cuento + noviembre; aunque luego lo empecé a hacer en octubre, encontré más gente que lo realiza y ahora lo he extendido a la vida diaria cuando me bloqueo... Cosas de la vida). Hice una lista de treinta palabras al azar y cada día de ese mes hacía un microcuento relacionado a la palabra que tocaba ese día. Es muy divertido y ayuda a refrescar e innovar.

   Los animo a intentar hacer sus propias listas para cada mes. O si no, a buscar listas de retos de escritura o las propuestas de octubre para los retos de dibujo y literatura de ese mes. Las pueden hallar con distintas etiquetas, tales como: inktober (sobre todo es para dibujantes, pero ¡qué va! igual sirve), cuentober, fluftober, fictober, taletober. De hecho, también hay personas que crean listas en febrero, noviembre y otros meses de acuerdo a las fechas festivas.

   Les dejo por aquí algunos ejemplos de estas listas.

De Motín Ficker en Wattpad

De Es de Fanfics en Twitter

De Cindy Elric en Instagram

De Lady Sherlyn Aithusa en Wattpad

De Es de Fanfics en Twitter

De Ecos de Tinta en Twitter

   3. Otra propuesta de improvisación que les traigo es la de utilizar situaciones. Me explico, en esta pequeña sesión ustedes escribirán cinco o diez (o la cantidad que quieran) circunstancias al azar. Luego pondrán un cronómetro, temporizador o alarma para que suene cada cinco o diez minutos. Ahora les toca escribir en ese tiempo una microhistoria o escena usando la situación de turno. Puede ser lo que quieran; por ejemplo: un terremoto en medio de la ciudad, una persona descubre que tiene poderes a los cuarenta años, un monstruo se ha infiltrado en un avión, alguien ha descubierto que está gravemente enfermo, alguien adoptó un animalito callejero…, lo que sea.

   Otra cosa que pueden hacer es inventarse títulos (pero al azar, sin pensarlo) en vez de las situaciones y trabajar sobre el mismo. Algo así como “El cantante desafinado”, “La hora quebrada”, “El panadero”, “Asilo para jóvenes y kinders para ancianos”, “La bailarina”. O combinan ambas cosas, ¿por qué no?: “El planeta azul”, un grupo de ancianos descubren un tesoro. ¿Qué podría salir de todo esto?

   Les dejo por aquí una pequeña lista con un mini reto de ideas para cuentos.

   4. Este también me fascina porque lo hago todo el tiempo: cambio de personaje. Agarren un personaje (o dos) que ya tengan hecho (o en proceso, pero preferiblemente que tenga una base sólida de personalidad, apariencia y vida) y lo ponen en un mundo alterno (el personaje será el mismo, su mundo y los otros personajes no).

   Pueden hacerse listas o simplemente pensar “¿qué pasaría si...?”, y ¡bum! tenemos otras perspectivas. Incluso ayuda a explorar la personalidad del personaje y medir cómo reaccionaría ante situaciones que no nos habíamos planteado antes. Pueden ser miserables en su mundo original y en un alternativo ser gobernante o un empleado común que tiene problemas financieros o personales, ¿qué se yo? Incluso pueden no moverlo de mundo, sino cambiarle algo (de clase social, sexo, familia, bando...) Las posibilidades son innumerables.

   Aquí les dejo unas pequeñas listas que hice para el caso.

   Recuerden siempre que la constancia es la clave. Para avanzar y alcanzar metas resulta fundamental el tener disciplina para estos ejercicios y para sus sesiones diarias del proceso sobre sus obras.

   Estos fueron los consejos y retos de hoy. Díganme en los comentarios cuáles les ha llamado la atención o si tienen sus propios ejercicios para practicar e improvisar.

   Atentamente, una beta de por ahí, ¡chao!

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