¡Hola, letritas hermosas!
Hoy vengo a ampliar un tema que toqué cuando hablé de la ficha para nuestros personajes: La vestimenta, la ropa, los conjuntos, el estilo…, está bien, sé que lo entendieron desde el título.
Tal vez no siempre, pero sí muchas veces nos preocupamos por la ropa que vestirán nuestros personajes para salir a escena. Dependiendo del tipo de obra (poema, microrrelato, novela...) y de los temas del mismo vamos a necesitar o no describir qué traen puesto nuestros personajes. A veces no es necesario porque simplemente no calza con la narración ni con los temas, pero cuando sí, tenemos que tomar en cuenta muchos aspectos.
Primero lo primero, hay que fijarnos en la personalidad del individuo a vestir. Parte de la personalidad se refleja en la ropa; algunos gustos, con qué se siente cómodo o incluso a qué se dedica. Ejemplos más que evidentes: un vegano no se va a vestir con cuero animal, y una entidad de la realeza no se va a vestir con harapos a menos que sea una situación extrema dentro de la historia. Entonces, si tenemos a un chico muy extrovertido y con gustos “alocados” probablemente se vaya a vestir con ropa colorida y no tema utilizar atuendos “raros” o estrambóticos. Una chica que guste muchísimo del negro podrá usar rosado o colores pasteles, pero en menor cantidad, pues su paleta de color será principalmente de colores oscuros.
Lo siguiente que debemos tener más que presente es la cultura que envuelve al personaje. Además, hay que pensar en las preguntas: ¿cómo es el clima en donde vive el personaje?, ¿cuál es la clase social a la que pertenece?, ¿vive en la zona rural o urbana?, ¿la corriente espiritual o religión que profesa influye en su indumentaria? Todo esto es importante para mantener la congruencia y la credibilidad. Por ello hay que tomar en cuenta el mundo creado, porque debe vestirse con comodidad y para la situación. No podemos pedirle a alguien que vive en pleno desierto que se vista de pies a cabeza con cuero negro o que ande con bikini como si la playa fuera equivalente a la zona desértica, se nos muere la criatura. Una juez jamás se va a poner un vestido de lentejuelas para un juicio y así sucesivamente.
Hay que acordarse de los estados sentimentales de los personajes. Nosotros muchas veces nos vestimos de determinada manera sólo porque nos sentimos alegres, tristes, exhaustos, etcétera. Así que ¿por qué nuestros bebés tendrían que eludir este hecho? Si el tema de la ropa tiene peso en su historia pueden jugar con este aspecto de forma exquisita. Por ejemplo, Fulanita podría vestirse siempre de colores brillantes, pero cuando está triste no usa más que buzos sin importar si está en la universidad o en la casa.
Otra cosa, las situaciones también determinan el conjunto escogido: una cita, una entrevista de trabajo, una salida casual… Incluso, pueden determinar posiciones y aspectos impalpables con los colores (sé que esto no es cine, pero puede aplicarse hasta cierto punto). Por ejemplo, en una reunión para llegar a un acuerdo, el amarillo y el gris en la ropa de los asistentes se pueden confrontar demostrando el primero el optimismo y el segundo la desesperanza.
¿Saben qué me da ideas para vestir a mis personajes cuando me cuesta elegir conjuntos? Buscar consejos y artículos sobre moda. Busco de todo: paletas de colores, psicología del color, tonos que se aconsejan para los tonos de piel, estilos aconsejados para cada figura, combinación de texturas y colecciones para determinadas estaciones. Aunque claro, para algunos será más fácil esto último; a mí se me dificulta combinar y mucho más encontrar ropa adecuada para las estaciones. Vamos, que Costa Rica está en pleno trópico y aquí puede llover, estar a 29 ℃, granizar y salir volando con el viento en el mismo día; al menos en la zona central, que es donde vivo. Pero bueno, de todas formas a veces una pasa frío por no perder el estilo o le vale tres hectáreas de remolacha los consejos de moda, así que también algunos personajes pueden hacerlo.
Un consejo para poder tener ideas a mano es crear un “banco de conjuntos” o “banco de ideas de ropa” (o como quieran, así los llamo yo). Tengo mi propia carpeta para el caso y tiene varias subcarpetas: mujeres, hombres, bebés, niños, niñas y paletas de colores. Ahí coloco imágenes de conjuntos e ideas de todo tipo. Aunque, para niños/as cuesta un poco más por el asunto de hipersexualización y de ponerles ropa para adultos en miniatura; así que les advierto que podrían molestar por encontrar poca inspiración a veces.
Otro punto: evitar los estereotipos: las personas de tez clara no son íconos de moda urbana occidental ni los de tez muy oscura son la personificación de la cultura afro o de los barrios bajos que evitan los de tez blanca. Hay una increíble variedad de ropa que refleja la cultura, la personalidad y un largo etcétera y no es necesario ser de determinado tono de piel ni nacer con algún rasgo para poder usarla.
Último, pero no menos importante: por favor, quitémonos la pereza de describir la ropa. Si han decidido colocarla asuman la responsabilidad de presentarla a los lectores como es debido: con palabras, con descripciones. Los lectores quieren leer un poema, un cuento, una novela, etcétera, no ojear un catálogo. He dicho esto porque hay una plataforma en particular (o quizá varias) que permite colocar imágenes por capítulo y resulta algo extraño que siendo libros se coloquen imágenes de cómo son los personajes y cómo se visten. Para eso son las letras, para eso escribimos, ¿qué cuesta invertir un par de líneas para decir que Mengano usaba una camiseta de dinosaurios, un pantalón de mezclilla oscuro, unas botas marrón y una bufanda azul? ¿Vieron? Ni siquiera usé los dos renglones completos.
Cabe añadir, que debe haber equilibrio entre las descripciones (y tampoco ser excesivos con estas a menos que sea necesario). Tanto hombres como mujeres (y los no binarios, por supuesto) deben tener una descripción de similar longitud y actitud (sí, a veces se nota la pereza o el entusiasmo). Resulta desproporcionado usar un párrafo entero para detallar un hermoso vestido y sólo un renglón para describir un traje entero masculino. Y ojo, la existencia de la ropa debe ser necesaria, si ponemos que Fulana se viste de flores es porque eso tendrá peso en la trama o para explorar el mundo en el que vive Fulana, tiene que haber un motivo claro.
Eso es todo por hoy, mis letritas. De paso les comparto mi banco de imágenes por si desean verlo o agarrar más ideas si ya poseen uno.
Atentamente, una beta de por ahí.
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