Las emociones y los sentimientos

   ¡Hola, letritas hermosas!

   Aunque en la vida diaria solemos utilizar las palabras “sentimiento” y “emoción” como sinónimos, y me incluyo, hay que aclarar que definitivamente no son lo mismo. ¿De qué nos sirve esto si estamos haciendo una novela o un fanfic? Nos sirve en que nuestros personajes sienten y deben sentir correctamente y de acuerdo a sus propio pasado y presente. Primero esclareceré las definiciones básicas y cómo funcionan las emociones y los sentimientos.

   Las emociones: Se trata de una reacción química y hormonal que tiene lugar en nuestro cerebro como una respuesta a un estímulo externo (ver algo que nos asusta como un insecto o imagen) o un estímulo interno (un recuerdo tanto positivo como negativo). Esto, en consecuencia, generará una alteración en nuestro cuerpo. El área de nuestro cerebro donde ocurre esta reacción es el sistema límbico (formado por varias partes del cerebro), aquel que se encarga de las respuestas fisiológicas y emocionales del cuerpo. Este sistema recopila y memoriza las experiencias que vayamos teniendo y por ende, tendemos a estar predispuestos a reaccionar de maneras específicas a determinados estímulos.

   Ejemplo: Si de niños un señor vestido de payaso fue más tenebroso que gracioso, es probable que nuestro cerebro acaba asociando a los payasos con el miedo y la incomodidad y ya de grandes tal cosa nos cause la necesidad de huir. Nuestro cerebro aprendió del estímulo y su reacción física será predeterminada.

   Las emociones no son permanentes, sigamos con el ejemplo del payaso: Nuestra vecina contrató a un payaso para la fiesta de sus hijos, a la cual nos invitó. El trabajador empezó su acto y por más que lo intentamos no pudimos sentir más que miedo por el trauma infantil que tuvimos. Al volver a casa posiblemente sigamos nerviosos, pero con el transcurrir de los días ese miedo se irá disipando y acabaremos por olvidarnos del asunto.

   Otro ejemplo: Nos reunimos con nuestras amigas para celebrar el ascenso de una de ellas. Bebimos, comimos, bailamos y nos divertimos a tope. La felicidad que llegamos a sentir esa noche podría durar hasta el día siguiente o una semana más, pero gradualmente se esfumará. Es una emoción, no tiene porqué durar demasiado.

   Los sentimientos: Son estados afectivos generados a partir de una emoción; pero, nacen después de incluir una evaluación consciente respecto a esa experiencia. Somos conscientes al analizar la experiencia y qué nos produce, tenemos más libertad de escoger que ese estado de ánimo se prolongue. Así que el sentimiento se produce de algo instintivo como la emoción luego de que un razonamiento se le aplique y los pensamientos lo alimenten hasta que se convierta en algo duradero, es decir, el sentimiento.

   Un ejemplo muy claro de esto es el del amor: Al principio, en la etapa del enamoramiento, las emociones se disparan al estar con esa persona especial. Hay mariposas en el estómago, la lengua se traba o habla demasiado, hay nervios, sonrojos y sudores... Pero, después de cierto tiempo las cosas son menos instintivas y las cosas se racionalizan más; cada quien decide seguir al lado de la otra persona porque realmente siente algo por ella, no una emoción, sino un sentimiento, sabe que le conviene, que tiene virtudes y defectos y que hay cosas más allá de tener insectos en el estómago.

   Otro ejemplo, de nuevo con las relaciones interpersonales, es cuando alguien que amamos nos hace enfadar. Ese momento en el que nuestro hermano menor rompe algo valioso para nosotros y nos ponemos muy enojados con él, le gritamos y lo hacemos a un lado. Luego, cuando nos hemos tranquilizado y pensamos con la cabeza fría, nos percatamos que nuestro hermano no merecía tales gritos, que el objeto es simplemente un objeto y que exageramos en nuestra reacción. Quizá nos venga el arrepentimiento por eso, porque no tenemos el sentimiento de odio a nuestro hermano, ese enojo fue una emoción y como tal, es pasajera.

   En resumen, la emoción es instintiva, unidireccional, básica y automática, mientras que el sentimiento va más allá de eso e incluye la capacidad de reflexionar conscientemente sobre todo lo que sentimos y conocemos acerca de lo abstracto y simbólico.

    Con todo esto claro, pasamos a la importancia de que nuestros personajes, sean ajenos (fanfics) como propios. Tengamos en mente, como lo he venido repitiendo en posts anteriores, que los personajes son humanos; no sólo se tienen que ver como personas, tienen que actuar y sentir como tal.

   Cuando algo saca de la monotonía al personaje, estos tendrán que reaccionar de alguna forma. No son robots. Recuerden la cantidad de emociones que pueden sentir en un sólo día: descubren que tenían tarea y se estresaron por no haberla hecho, el autobús esta vez los esperó y se sintieron aliviados porque no llegarían tarde, en el almuerzo un amigo les regaló una golosina que los hizo sentir muy bien, terminaron los deberes pendientes y no pudieron sentirse más satisfechos de sí mismos, o algo salió mal y la decepción los entristeció…

   ¿Y qué hay de los sentimientos? Ese cariño a los abuelos o a los padres, las bromas o pequeñas peleas con los hermanos que terminan bien porque los quieren también, o ese archienemigo con el que compiten constantemente y les genera tratar de sacar su ciento diez por ciento. Sus personajes también son así; no pueden estar siempre alegres, continuamente enojados ni completamente  tristes en una eterna depresión.

   Las personas expresamos y reaccionamos tanto con lo verbal como con lo corporal. O sea, que si algo nos asquea, posiblemente arruguemos la nariz y hagamos una mueca con la boca. Si algo nos sorprende, nuestros ojos se abrirán y nos volveremos más atentos al entorno o aquello a lo que estemos prestando atención. Y claro, no todos reaccionamos de la misma forma, con el miedo hay personas que se paralizan, otras tienden a huir y algunas más se intentan proteger lanzando algún golpe por instinto. ¿De qué manera reaccionan sus personajes para cada situación? ¿Acaso tienen alguna forma particular de actuar frente aquello que los alegra, los consterna o los asusta? ¿Dicen malas palabras o hablan en su idioma nativo o más bien se quedan mudos?

Créditos de imagen a: NeuroRiquezas.

   También es una posibilidad que sepan guardar bien sus emociones y sentimientos, pero siempre hay algo que puede salir a la luz, quizá cuando esté exhausto o sea demasiada la impresión. Sus ojos, su boca, su nariz e incluso su postura dirán algo sobre lo que están sintiendo. Además, dichas reacciones no tienen que ver necesariamente con su sexo; sí, puede ser que tenga que ver con su contexto social, pero cualquiera de las ideologías que tenga encima no le van a quitar su sentir. El sentir es humano y aunque pataleen, tales emociones y sentimientos no se irán. Que se note que pueden sentir y que sea congruente con sus personalidades les agrega humanidad a los personajes y los lectores van a apreciar eso muchísimo.

   Cabe mencionar, que no sólo los protagonistas o secundarios deben mostrar tener emociones y sentimientos, los antagonistas también. Las personas, por más odio que guarden, no sólo perciben ira o rencor; ¿dónde está su vergüenza, su dicha, sus dudas, su arrogancia, su piedad? ¿De verdad no tienen debilidades? No sé, ¿perritos? ¿Dónde está aquello que los hace felices de verdad? Debe haber algo que los haga tan humanos como a los “buenos”, algo que les dé carisma.

   Utilizando varias fuentes compilé algunas listas de sentimientos y emociones, algo muy útil para poder describir mejor cada sentir de nuestros personajes y, ¿por qué no?, los propios. De hecho, es algo que les recomiendo hacer: no sólo fichas para sus personajes  (y también para sus mundos), sino listas de emociones, sentimientos y reacciones posibles para los personajes.

   Esto sería todo por el momento, mis letritas, nos leemos pronto.

   Atentamente, una beta de por ahí, ¡chao!

...

   Fuentes de interés con conceptos básicos:

   Diferencia entre emoción y sentimiento. Web: Neuromarca.
   Lista de 250 emociones y sentimientos. Web: Psicólogos y terapeutas en México.
   Sistema límbico: partes, funciones y enfermedades. Web: Psicología-Online.

   Palabras clave: las emociones de los personajes, los sentimientos de los personajes, cómo ponerle emociones o sentimientos a los personajes, diferencias entre emoción y sentimiento, diferencia entre emociones y sentimientos